¿De dónde viene mi pasión por España? Por todo lo español -flamenco, corrida, peinetas, flores en el pelo, mantillas. Nada en concreto. Pero hay una conexión secreta entre nosotros. Sin ninguna duda, la hay…‍

‍Maya Plisétskaya‍

Una gracia especial, propio estilo único, increíble plasticidad y musicalidad, fenomenal longevidad creativa: se puede encontrar más epítetos, pero nunca serán suficientes para describir el inusual talento de la gran bailarina rusa Maya Plisétskaya, que durante dos años dirigió el Teatro Lírico Nacional de España. Aquel período se considera la “época dorada” del ballet nacional español.

El 29 de noviembre a las 18 horas os invitamos a participar en la conferencia en línea, dedicada a la prima bailarina del Teatro Bolshói y coreógrafa Maya Plisétskaya. La conferencia se llevará a cabo dentro del ciclo “Mujer. Época. Destino” y será impartida por Anna Silyunas, crítica de teatro, historiadora de arte y directora de la Fundación Cultural “CdR en Barcelona”.

En 1960, Maya Plisétskaya se convirtió en la primera bailarina oficial del Teatro Bolshói, donde trabajó durante más de 40 años. Entre sus interpretaciones más brillantes e inolvidables que le trajeron fama mundial, cabe destacar a su sensual española Kitri del ballet ‘Don Quijote’ de Ludwig Minkus; su Carmen de la ‘Carmen Suite’ dirigido por el coreógrafo Alberto Alonso; su ídola del ballet ‘Bolero’ dirigido por el coreógrafo francés Maurice Béjart; además de su Raymoda, Anna Karenina, Odette y Odile.

En 1958, Maya Plisétskaya se casó con Rodion Shchedrin. Se conocieron en 1955 en una velada musical organizada por Lilia Brik; aquella noche el joven compositor asombró a todos tocando el piano, pero el amor entre los futuros esposos no comenzó de inmediato. Tres años más tarde, Shchedrin vio a Plisétskaya durante un ensayo en el teatro y la invitó a dar una vuelta en su coche por la Moscú nocturna. Su larga y hermosa historia de amor perduró durante más de 50 años, hasta la muerte de la bailarina.

“La gente que ama se eleva por encima de lo ordinario, de la mezquindad de la vida, vive en otra dimensión. Me lo descubrió Marc Chagall, cuyos enamorados vuelan por encima de las nubes, pueblos y ciudades. Parece que les crecen las alas. El baile también se siente como el vuelo”, creía bailarina.

Hablaremos sobre la vida y obra de Maya Plisétskaya, una destacada bailarina, conocida también por su talento dramático, durante nuestra próxima conferencia.